
Por Joaquín H. Vela González
Parece juego, pero genera mucha incertidumbre tratar de descifrar lo que está pensando Donald Trump. La incertidumbre es lo contrario de la certeza, no se tiene precisión hasta donde puede llegar este personaje. De lo único que se tiene verdadera certeza es que su forma de tomar ventaja al negociar es generar temor; falta de seguridad e incertidumbre.
La lógica económica pierde coherencia con sus formas y sus razonamientos, es por ello que pensamos que es correcto hacer el análisis de sus propuestas con la rigurosidad que lo requieren nuestra formación económica.
¿Qué efectos económicos tendría la aplicación
de aranceles como lo propone Donald Trump?
- El primer efecto de aplicarse es que generaría una inflación aproximada al monto del arancel propuesto.Al cobrar un impuesto de 25% a los productos de origen nacional mexicano, los productores trasladarían ese cobro al consumidor. La inflación afectaría la estructura de precios de la economía de los Estados Unidos, generando con ello una reacción de los consumidores, que pueden o no comprar el producto según sea su necesidad y su capacidad adquisitiva. Si el volumen de ventas cae, el tema afectaría a los productos mexicanos, que pueden o no generar una contracción de su producción, y con ello de la reducción de ingresos y empleo, en espera de que se normalicen las cosas.
- El segundo efecto inmediato de grandes dimensiones: el impacto de los aranceles sobre los precios, si el producto pertenece a una de las cadenas globales de producción, (es la producción de partes en diferentes países)como funciona actualmente en buena parte de la nueva generación moderna de productos globales y cuyas cadenas no pueden pararse, el efecto se trasladaría al precio del producto final, el cual con esos aumentos podría dejar de ser competitivo y con ello obligaría a los productores a revisar su viabilidad futura.En el caso mexicano, esto afectaría a muchas maquiladoras que funcionan en ese esquema de división internacional del trabajo.
- El tercer efecto sería sin duda la baja en el nivel del intercambio comercial, en una de las cadenas más grandes del planeta. Esto sería gravísimo por el volumen que se comercia en este mercado. Estados Unidos es el país con el que México intercambia mercancías. También México es el primer país en volumen de exportación para EUA. Aunque hay que reconocer que México accedió a este lugar después del inicio de la guerra comercial con China. La afectación de esta dinámica comercial tendría efecto dominó con la mayoría de los mercados del mundo y tendría un costo incalculable.
- A una de las ramas productivas que más afectaría es a la industria automotriz. Tanto México como Canadá son países ensambladores de automóviles, precisamente es uno de los ejemplos típicos de las cadenas mundiales de valor. En México, se ensamblan, por sus bajos salarios de la fuerza de trabajo y por su cercanía con el mercado más grande del mundo. Un arancel de 25% sería mortal para ese sector industrial. Les echaría para abajo todo el esquema sobre el que está montado su negocio. Un arancel de este tamaño, les haría perder las ventajas comparativas sobre el que fue planeado el mismo.Este tema está vigente desde hace muchos años cuando muchas empresas armadoras de automóviles se instalaron en México para utilizar al país como plataforma de exportación hacia los Estados Unidos, poniéndoles made in México, para que se contara como exportación mexicana y no de su país como debería ser.
- De igual manera pasa con todas las empresas maquiladoras y ensambladoras de productos electrónicos como son las que ensamblan pantallas y componentesy productos electrónicos principalmente en la frontera norte. Somos de igual manera el último eslabón de las cadenas productivas a escala mundial en el ensamblado de este tipos de productos y nos van a afectar de manera directa y con un alto impacto la imposición de estos aranceles del 25.%. Los cuales parece ser que están dirigidos principalmente a estas últimas dos industrias, por ser las más dinámicas del mundo.
- En el caso mexicano nos van a afectar de manera directa las exportaciones de productos de origen agrícola como el aguacate y los llamados frutos rojosque constituyen un ingreso importante para nuestros productores, al igual que un número importante de pescados y mariscos que exportamos desde siempre al vecino país.
Haciendo un recuento de las afectaciones, de nueva cuenta se transparenta nuestra terca realidad. En las exportaciones de la industria automotriz y la electrónica, solo somos maquiladores del capitalismo norteamericano y en el mejor de los casos del capitalismo mundial y recientemente de los Chinos. Y realmente lo que exportamos desde siempre al exterior de manera verdadera son productos de origen agropecuario y en el mejor de los casos del capitalismo mundial, industria ligera, con poca elaboración y valor agregado.
El principal efecto negativo que vamos a sufrir es la quiebra de empresas, muchas de ellas maquiladoras y su secuela de pérdidas de empleos e ingresos de los asalariados mexicanos. Y continuar con el proceso de empobrecimiento y precariedad y desafortunadamente esto abona a continuar profundizando el proceso de descomposición social.
Esperamos, de cualquier manera que nunca se apliquen los ahora famosos “aranceles”.
velagj@economia.unam.mx