
- El Presidente estadounidense justificó el envío de tropas al considerar que la amenaza interna no es visible ni identificable como un enemigo tradicional.
Ciudad de México, 30 de septiembre (SinEmbargo).- En una reunión convocada por el Pentágono, el Presidente de Estados Unidos (EU), Donald Trump, aprovechó su presencia ante la élite militar del país para advertirles sobre una «invasión» dentro del territorio nacional.
En su discurso, Trump dijo que las fuerzas armadas deben estar listas para enfrentar amenazas en el país, y que este tipo de riesgos son tan serios como los conflictos con otros países.
“Nos encontramos bajo una invasión desde dentro. No es diferente de la de un enemigo externo, pero más difícil, de muchas maneras, porque no llevan uniformes”, declaró Trump desde la base de marines de Quantico, Virginia.
El encuentro, celebrado en la Academia de la Infantería de Marina, fue catalogado como inédito por reunir a la cúpula militar completa del país. También se desarrolló mientras vence el plazo para aprobar el presupuesto federal, lo que podría derivar en un cierre parcial del Gobierno federal, afectando a millones de empleados públicos y servicios esenciales.
El mandatario estadounidense estuvo acompañado por el Secretario de Defensa, Pete Hegseth, y otros altos mandos, quienes escucharon las advertencias sobre lo que Trump consideró un riesgo para la seguridad nacional desde actores internos, sin dar detalles específicos sobre quiénes podrían estar involucrados.
También defendió el uso de las fuerzas armadas para enfrentar disturbios civiles y anunció el despliegue de tropas en ciudades gobernadas por la oposición demócrata. “La próxima será Chicago”, prometió, tras mencionar intervenciones en Los Ángeles, Washington, Memphis y Portland.
“El mes pasado firmé una orden ejecutiva para adiestrar a una fuerza de reacción rápida que contribuya a sofocar disturbios civiles. Esto va a ser algo grande para la gente en esta sala, porque es el enemigo interior y tenemos que enfrentarnos a él antes de que quede fuera de control”, afirmó.
El Presidente también elogió el estado actual de la capital estadounidense: “Washington es ahora una ciudad segurísima. Es perfecta. De hecho, he salido a cenar con mi gente, y antes no lo hubiera hecho”. Asimismo, se refirió a otros temas, desde aranceles hasta estética militar: “No hace falta tener un barco feo para decir que tienes tecnología silenciosa”.
El Secretario de Defensa, Pete Hegseth, aprovechó el encuentro para reforzar normas estrictas de aptitud física y presentación personal, así como para defender el despido de más de una docena de líderes militares, incluidos altos mandos de minorías y mujeres, bajo la justificación de eliminar un liderazgo “tóxico” y promover ascensos basados en el mérito.
Hegseth expuso su modelo de ejército: sin corrección política, sin diversidad y con exigencias físicas iguales para hombres y mujeres. “Líderes políticos irresponsables nos encaminaron en la mala dirección y nos perdimos. Nos convertimos en el ‘Departamento Woke’. Pero ya no”, sostuvo. “La era de la corrección política se ha terminado. O haces el trabajo de modo disciplinado, estás adiestrado y en forma, o te vas”.