
- La Suprema Corte que culminó este martes sus actividades fue creada por el priista Ernesto Zedillo Ponce de León con un acto despótico, ya que, sin tener facultades constitucionales, destituyó a todos los ministros y nombró a sus afines.
Ciudad de México, 19 de agosto (SinEmbargo).– Norma Lucía Piña Hernández, la última presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que sirvió al periodo neoliberal, dijo hoy en su última sesión que “el trabajo de cada uno es la mejor voz y lo que hace cada uno en la labor cotidiana por la justicia es nuestro legado. La congruencia, la ética, el trabajo, la perseverancia, la excelencia, la honradez, y la dignidad son y serán la mejor carta de presentación ante el escrutinio de la historia”.
El 5 de diciembre de 1994, Ernesto Zedillo presentó su Reforma Judicial al Congreso y todos los ministros fueron removidos. Desde allí empezó la Suprema Corte que conocemos. Hasta la Reforma Judicial impulsada por Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y efectuada por la actual Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo.
La SCJN realizó al mediodía de este martes la última sesión del pleno. Al inicio de la reunión, la Ministra presidenta, Norma Piña, aclaró que la sesión extraordinaria fue convocada únicamente para resolver asuntos electorales, con el fin de evitar especulaciones. Entre los temas abordados destacó la validación de la elección de dos magistrados de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
Este 19 de agosto fue un día histórico para la Corte, ya que se trató de la última sesión conjunta de los integrantes del pleno: Norma Lucía Piña Hernández, Margarita Ríos-Farjat, Yasmín Esquivel Mossa, Loretta Ortiz Ahlf, Lenia Batres Guadarrama, Javier Laynez Potisek, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Juan Luis González Alcántara Carrancá, Alberto Pérez Dayán y Jorge Mario Pardo Rebolledo, varios de ellos nombrados durante el sexenio de Enrique Peña Nieto (EPN).
Durante la sesión, la Ministra presidenta explicó que el Artículo 96 de la Constitución establece que el Instituto Nacional Electoral (INE) debe declarar la validez de la elección y remitir los resultados a la Corte, que resuelve exclusivamente las impugnaciones relacionadas con las magistraturas de la Sala Superior del TEPJF. Señaló que, incluso ayer, ingresaron cuatro recursos de inconformidad que se abordaron en la sesión, y que ante la eventualidad de que llegaran más —como efectivamente ocurrió con otros cuatro—, se decidió convocar a esta sesión extraordinaria.
Mientras tanto, en el exterior del recinto, un pequeño grupo de integrantes de la organización Resistencia Civil Activa y Pacífica (RECAP), encabezados por Rolando Solís y Emilio Pineda, protestaron contra los magistrados Felipe de la Mata y Felipe Fuentes Barrera, a quienes acusaron de “traidores de la democracia”. Con una pancarta que exigía la anulación de lo que calificaron como “la elección más fraudulenta en la historia del país”, pidieron a la SCJN no convertirse en “otro satélite del partido gobernante”. Los manifestantes expresaron que no quieren “una Corte del Bienestar, llena de burros e ignorantes, sin la capacidad que hoy sí existe en esta Corte”.
Cabe señalar que en esta sesión, el primer proyecto que se discutió fue sobre la Constitución de Yucatán, derivado de un recurso de impugnación presentado por la Consejería Jurídica de la Presidencia y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH). El planteamiento sostenía que la legislación yucateca contraviene la Constitución federal al permitir la reelección del presidente del Tribunal local, lo que podría extender su gestión hasta 2037, en contradicción con la Reforma Judicial federal aprobada en septiembre de 2024.
No obstante, los ministros de la Corte desecharon los cuatro recursos de inconformidad en contra de los resultados de la elección de las magistraturas de la Sala Superior del TEPJF. Jorge Mario Pardo afirmó que se desecharon las impugnaciones por no haberse acreditado la legitimación que establece la Ley de la materia para poder impugnar esa elección.
En tanto, Norma Piña sostuvo que estos recursos eran los últimos que llegaron, y que al desecharlos y al considerar que ya no habrían de llegar más, es que determinaron cerrar sus sesiones y dio un mensaje de despedida.
Piña se despide en la última sesión
En la última sesión del pleno de la actual Suprema Corte, la Ministra presidenta Norma Piña ofreció un mensaje de despedida, en el que reconoció a las ministras y los ministros que integraron este ciclo de más de tres décadas.
«Al levantar esta sesión, culmina un ciclo fundamental de la vida pública mexicana que inició hace poco más de 30 años. Esta historia se ha escrito con debates intensos, disensos fecundos y consensos que, lejos de aplacar la diversidad, han fortalecido el núcleo de nuestra democracia», expresó.
Asimismo, Piña Hernández consideró que «este instante, cargado de memoria y de futuro, es un recordatorio de que la justicia no es una obra concluida, sino una construcción viva que nos trasciende».
«Hoy más que nunca resulta imperativo reconocer el papel histórico de este tribunal constitucional. Su legado de precedentes y resoluciones ha constituido un sólido bloque de protección de los derechos fundamentales, garantizando además la progresividad de los derechos humanos», subrayó.
La Ministra también aseguró que «la Suprema Corte no es sólo un órgano del Estado», sino «la piedra angular de la justicia constitucional, el máximo garante del ordenamiento jurídico nacional, y un bastión en la defensa de la democracia constitucional y las libertades de todas las personas».
«La Suprema Corte ha recorrido un largo camino para construir su legitimidad. No me corresponde a mí valorar en qué medida ese objetivo se alcanzó. Serán nuestras sentencias las que darán cuenta de ello. Será la sociedad y la historia misma las que juzgarán a quienes hemos juzgado», añadió.
Norma Lucía Piña Hernández confió en que «mientras existan mujeres y hombres dispuestos a defender la justicia con integridad, este país tendrá un horizonte de dignidad y de libertad».
«La Ley fundamental ilumine este horizonte. La Constitución debe seguir siendo esa brújula moral que nos guía, no como un libro viejo, sino como un pacto vivo que exige renovar la lealtad cada día», apuntó frente a sus compañeras y compañeros del pleno.
Posteriormente, Piña citó al décimo presidente del Tribunal Supremo de Australia, quien dijo: «Ustedes tienen el privilegio de cumplir las responsabilidades del cargo y están obligados a dejarlo inmaculado cuando llegue el momento de abandonarlo».
«Es así que el trabajo de cada uno es la mejor voz y lo que hace cada uno en la labor cotidiana por la justicia es nuestro legado. La congruencia, la ética, el trabajo, la perseverancia, la excelencia, la honradez, y la dignidad son y serán la mejor carta de presentación ante el escrutinio de la historia», concluyó.
De este modo, a las las 13:53 horas terminó la última sesión de la SCJN, con lo que se cerró un ciclo de tres décadas, desde que Ernesto Zedillo Ponce de León la creó. Hasta el próximo 1 de septiembre llegarán las y los nuevos ministros, quienes fueron electos por primera vez en la historia a través del voto popular del pueblo de México.