Carlos H.
Secreto a Voces
Por Rafael Alfaro Izarraraz
Desde que inició el gobierno de AMLO ocurrió un cambio en la relación de México y Estados Unidos.Obrador introdujo un elemento que es fundamental comprender: por primera ocasión se introdujo la idea de convertir el número de migrantes mexicanos, cuya cifra asciende a 30 millones, en una fuerza política que hiciera sentirsu peso ante las arbitrariedades que es común viva la población de origen mexicano principalmente la que cruzó la frontera sin pedir permiso. La reciente revuelta de los migrantes, iniciada en Los Ángeles, contra las redadas de Donald Trump es parte de ese terremoto social que cimbró a México en 2018. No se puede entender lo que ahora ocurre si no se toma en consideración aquel evento con el que dio inicio la revolución pacífica obradorista. Ahora bien, lo que hicieron Obrador y Sheinbaum fue muy simple ante la ausencia histórica de alguien que defendiera a los migrantes mexicanos.
La época en que inicia formalmente la migración de mexicanos hacia EU fue cuando se empieza a construir el ferrocarril en el oeste del territorio estadounidense que demanda una gran cantidad de mano de obra. Una segunda etapa fue durante la Segunda Guerra Mundial y el Programa bracero, ante la falta de mano de obra en EU. Surge la migración ilegal como un método de cruzar las fronteras “sin papeles” hacia EU, que coincide con el fin de los Programa bracero y la aplicación del modelo de economía neoliberal. Le sigue la firma del TLC (luego TMEC) y la demanda de mano de obra en EU y la migración ilegal. Nunca había habido un gobierno en México como el de la 4t que se preocupa por lo que le pasa a quienes cruzan la frontera, así como con respecto a quienes viven de aquel lado de la frontera como ciudadanos mexico-americanos (Raúl Delgado y Humberto Márquez).
No es que Obrador o la actual presidenta Claudia Sheinbaum hayan establecido como estrategia intervenir en la vida política del vecino del norte (como de mala fe la derecha mexicana ha tratado de hacerle creer a la población aquí y en EU) ambos son muy cuidadosos en no intervenir en la vida política de otras naciones. Simplemente, lo que han hecho es (en el contexto del triunfo del 2018 y ante la ausencia de gobiernos preocupados por los migrantes) defender a los mexicanos que viven en los Estados Unidos de las arbitrariedades. Ese hecho tan simple ha sido el factor que ha generado entre la población mexicana que vive en EU un sentimiento de confianza ante la política inhumana que ha desatado el gobierno del presidente Trump. Bueno, otro factor que se ha convertido en factor es la caída del prestigio del presidente estadounidense entre la población del vecino del norte.
Lo anterior, en el contexto del cambio que está ocurriendo a nivel mundial en el que EU ha dejado de ser potencia mundial única. Bajo otras circunstancias la resistencia migrante tal vez ni siquiera hubiera ocurrido. Sin embargo, la tendencia hacia el debilitamiento del poder de EU en el mundo, el conflicto con China del que no ha salido bien librado el presidente Trump que ha tenido que abrir una línea de diálogo con el presidente Xi, no se puede soslayar porque solo le venderán tierras raras por seis meses. El fracaso de la paz entre Ucrania y Rusia, que se ufanaba de resolver de inmediato también pesa en su entorno. El fracaso de la imposición de aranceles a todos los países del mundo y la respuesta que ha recibido de naciones poderosas como China o la India, de igual manera contribuye a su debilitamiento y al crecimiento del espíritu de resistencia. La idea de que EU dejó de ser invencible se percibe cada vez más y más.
La confianza de los migrantes y residentes mexico-americanosse había venido mostrando durante el gobierno de Obrador. Cada visita de Obrador a EU se transformó en un evento especial para nuestros hermanos migrantes o residentes en EUque acudieron a verlo. El presidente mexicano demandó a sus pares estadounidenses que pararan su narrativa racista y de ofensas contra los mexicanos ya que no merecían el trato que públicamente les daban los políticos de EU al tratarlos como delincuentes y violadores. Por el contrario, tanto Obrador como Sheinbaum, en las pláticas con el gobierno de EU, han destacado las virtudes de los migrantes mexicanos como trabajadores de los mejores del mundo y el de contribuir a la grandeza de EU. De acuerdo a lo que la presidenta Claudia ha expuesto, el mismo presidente Trump ha tenido que reconocer la importancia de la población mexicana en EU.
Aparte del cambio, existe otro factor que detectó originalmente Obrador. Desde el censo del año 2000 en EU se sabe que el 7.3 por ciento de la población de ese país es de ascendencia mexicana y que a partir de entonces representa la segunda minoría más importante y que, a los mexicanos, le sigue la población afrodescendiente. Todo esto es muy importante para la vida política y cultural de EU porque representa un cambio demográfico de la población hacia el futuro y en el presente, por supuesto. En número cerrados para el 2000 la población de origen mexicano en EU era de 18 millones; 24 millones en 2010; 31 millones en 2020; para el 2030 serán 40 millones; 2050, 48 millones, aproximadamente. La mayoría de la población, un 54.7 por ciento de la población está (en 2025) entre los rangos de 20 y 65 años de edad. El 26.8 es menor de 20 años (de acuerdo a cálculos de Aguirre e Infante).
Los datos no checaban. el número de la población de origen mexicano en EU y su importancia en la vida política no se correspondían.Son ahora 30 millones, aproximadamente, pero su influencia es cero en la vida política interna de EU. Decía López Obrador que los políticos estadounidenses habían tomado a los mexicanos como si fueran una “piñata”. En cada elección se les utilizaba como chivos expiatorios de lo que ocurría en parte de la vida política interior del vecino del norte, denigrándolos. No había quien los defendiera porque los gobiernos mexicanos eran tan corruptos y vinculados al narcotráfico que estaban sujetos a la supervisión de los políticos estadounidenses y, de esa manera, los tenían callados. La gran cantidad de mexicanos no tenía presencia política.
En otro ejemplo, la población judía no llega a los 8 millones de personas y sin embargo, ahora se han develado documentos de su intervención en la vida política de EU al grado tal que decide y es parte de las élites y las políticas que se deciden para el interior de los mismos EU así como en el mundo. El lobby sionista en Nueva York es la voz de los principales propietarios de la banca mundial. De acuerdo a información que se ha desclasificado participaron en el asesinato de John F. Kennedy debido a que este se negaba a que Israel pudiera fabricar la bomba atómica, además del regreso de palestinos desplazados de sus territorios. De igual manera, los cubanos apenas llegarán a los tres millones en EU, pero su presencia ha sido fundamental para que a Cuba se le haya impuesto un criminal bloque comercial.
Existen algunos aspectos que es propio de los fenómenos migratorios, de acuerdo a Delgado y Márquez, que debilitan la identidad de la población migrante. La población que migra hacia otra nación a la vez que trata, aunque no depende de su voluntad, de integrarse lo más pronto posible a los segmentos de la población hegemónicos, como los anglosajones que dominan en los EU. Sin embargo, de inmediato establece tratos con aquellos que son parecidos él, es decir, con los de su mismo origen con los que es más fácil identificarse cuando se desplaza a una nación que no es la suya. Particularmente, a la población mexicana ya establecida le pasa algo. Y es que las generaciones se estancan en un determinado nivel socioeducativo a la tercer o cuarta generación. No estudian con la misma tradición que los “gringos” que alcanzan niveles de educación por encima de los de origen mexicano.
No obstante, el alcanzar ciertos niveles los hace inclinarse por posturas conservadoras que los hacen clientes del Partido Republicano y votantes por Donald Trump. Se vuelven en contra de los migrantes y se oponen a su presencia porque se sienten que los van a desplazar del lugar que han alcanzado. Por comentarios que me han hecho algunos migrantes, señalan que el desabasto de productos y lo caro de aquellos a los que tienen acceso ha provocado que despierten un poco su conciencia con respecto al presidente Trump al que apoyaron. El punto es que ese desencanto los puede llevar al Partido Demócrata que en algunos casos es peor que el Partido Republicano en materia de migración. Lo importante es el cambio que ha ocurrido y ojalá eso implique una elevación de la conciencia de nuestros hermanos mexicanos.
La situación de la resistencia migrante es ahora más compleja, pero lo que era un pequeño grupo de migrantes que se manifestaban contra las redadas en Los Ángeles puede terminar con el proyecto político del presidente Trump y eso no es cualquier cosa, algo está cambiando profundamente en EU.
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