Adictos al Dinero Ajeno

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Opinión

El INE deberá fiscalizar con rigor a todas las organizaciones que buscan convertirse en partido
político, entre ellas la residual del PRIAN y Claudio X. González, a la que fluirá abundante dinero,
incluyendo el de oscuro

Por Álvaro Delgado Gómez
Xóchitl Gálvez, Cecilia Soto, Gustavo Madero, Guadalupe Acosta Naranjo, Emilio Álvarez Icaza,
José Antonio Crespo y otros personajes residuales del PRIAN del magnate Claudio X. González
construyen una nueva fuerza opositora que, junto con decenas de proyectos análogos —13 hasta
este lunes—, han empezado a mover millones y millones de pesos, en un país donde los políticos
son adictos al dinero fácil y la política es sinónimo de negocio.
El Instituto Nacional Electoral (INE) deberá reforzar la fiscalización de los recursos que emplearán
todas las organizaciones que quieren convertirse en partidos políticos, que van a contar con
multimillonarios recursos, incluidos los de oscuro origen, como los que financiaron las campañas
sucias del 2024 —en México y desde el extranjero— asociadas a Claudio X. González.
Aunque lo niegue, y su padre elogie el “primero los pobres” de Andrés Manuel López Obrador y
asista a actos con la presidenta Claudia Sheinbaum, González Laporte apadrina a políticos que, tras
el fracaso en 2024, quieren crear nuevas formaciones partidarias o una sola. Y ninguno de estos
activistas son desinteresados, sino adictos al dinero, el fácil y el ajeno.
Aunque la política en México es también sinónimo de impunidad, no siempre los políticos sucios se
salen con la suya: El origen oscuro de los recursos que Felipe Calderón y Margarita Zavala
emplearon para México Libre, algunos presuntamente provenientes del narcotraficante Genaro
García Luna, frustró ese embrión de partido hace seis años.
Precisamente uno de los personajes que participó en negarle el registro al partido de Calderón fue
Edmundo Jacobo Molina, el exsecretario ejecutivo del INE que ahora es activista opositor junto con
Gálvez y Acosta Naranjo, quienes por ahora están separados y cuya debilidad los hará unirse al
proyecto en el que participa también Leonardo Valdés Zurita, el antecesor de Lorenzo Córdova en
la presidencia del órgano electoral federal, que desde el 2003 controló el PRIAN y ya no les alcanzó
hasta el 2024.
Todavía en la elección federal del 2021, el INE actuó de manera abiertamente facciosa: En el
domicilio personal de Jacobo Molina se realizó, el 3 de marzo, una reunión clandestina encabezada
por Lorenzo Córdova, a la que asistieron el priista Alejandro Moreno Cárdenas, el panista Marko
Cortés y el perredista Jesús Zambrano, tras lo cual el órgano electoral anuló decenas de
candidaturas de Morena.
Por lo pronto, los animadores del partido que agrupa a los residuos del PRIAN y del extinto PRD
tienen a expertos del INE para escabullir la fiscalización de los recursos que usarán para movilizar
al menos a 60 mil personas a las asambleas que deben realizar en todo el país para obtener el
registro como nuevo partido político y participar, sin posibilidad de alianzas, en las elecciones
intermedias de 2027.

Los requisitos para constituir un nuevo partido político son celebrar asambleas en por lo menos 20
de las 32 entidades o en 200 de los 300 distritos electorales del país. En las distritales deben
participar al menos 300 afiliados y en las estatales 3 mil en cada una. Es decir, se requiere, en
cualquier modalidad, de por lo menos 60 mil mexicanos con credencial de elector vigente.
Hasta el lunes 13, las organizaciones políticas que han manifestado ante el INE su voluntad de
convertirse en nuevos partidos políticos ascienden a 13, pero serán muchos más, si se recuerda que,
hace seis años, se registraron 106, más del doble de las 52 solicitantes de 2013.
Hace seis años, sólo siete cumplieron con las asambleas y los militantes que exige la ley electoral,
pero sólo obtuvieron el registro como partido stres:
Encuentro Social de Hugo Eric Flores, Redes Sociales Progresistas de Elba Esther Gordillo y
Fuerza Social por México de Pedro Haces y Ricardo Monreal.
Tan poco atractivas resultaron estas tres formaciones que en la elección de 2021 no lograron el
mínimo de 3% de los votos y perdieron el registro. Ahora ha comenzado el proceso de solicitudes
de registro, que duran todo enero.
La obligación del INE es evitar que las agrupaciones que buscan convertirse en partidos no le pasen
la rata frente a sus ojos, con el uso de dinero ilegal para la afiliación de militantes y la organización
de las asambleas.
En 2021, el INE impuso multas por más de 6 millones de pesos a las siete organizaciones que
buscaban convertirse en partidos políticos, debido a las irregularidades encontradas en la revisión de
sus informes mensuales de ingresos y egresos.
La multa mayor, de casi 2.7 millones de pesos, fue para la asociación de Calderón y Margarita
Zavala que quería convertirse en México Libre y que, precisamente por el financiamiento ilegal
—fraude al fin—, no logró su registro.
Ahora como entonces, el INE deberá fiscalizar con rigor a todas las organizaciones que buscan
convertirse en partido político, entre ellas la residual del PRIAN y Claudio X. González, a la que
fluirá abundante dinero, incluyendo el de oscuro origen.
¿Alguien piensa que Xóchitl Gálvez, Cecilia Soto, Gustavo Madero, Guadalupe Acosta Naranjo,
Emilio Álvarez Icaza, José Antonio Crespo y sus otros compañeros de viaje son mexicanos
desinteresados? Ando buscando al tonto que se lo crea.

Carlos H.


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