Carlos H.
Opinión
Por Jorge Meléndez Preciado
Si en las dos primeras listas de designaciones realizadas por la presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, hubo amplios reconocimientos, en la tercera se dieron a conocer reclamos hacia algunos presentados como parte del gobierno que iniciará en octubre de este año.
Uno, acerca del cual persisten críticas, reclamos y hasta denuestos es Mario Delgado, quien va a la Secretaría de Educación Pública (SEP), una de las más importantes porque deberá transformar la base de lo que se necesita para un México incluyente, sólido y con futuro.
El mencionado, que fue líder de Morena, ha trabajado en muchas encomiendas, pero no se distingue por su inteligencia, capacidad y valores, aunque siempre cumple las órdenes que le indican sin chistar, sean del talante que el jefe indique. Mal para todos.
Otra designación que trajo algunas críticas, aunque enormes reconocimientos, fue la de la próxima secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez Velázquez.
Uno de ellos, el encargado de un programa llamado: El Hueso (en su nombre lleva la fama), fue Enrique Hernández Alcázar, quien trató de hacer sarcasmo y escribió en X acerca de la mencionada: “De niñera de los hijos de AMLO a secretaria de Gobernación”.
Las críticas a su posición fueron abundantes y bajó, casi de inmediato, su tontería, pues la trayectoria de Rosa Icela es abundante, siempre con grandes logros, uno anterior al reciente de encargada de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, fue secretaría general en la administración de Claudia Sheinbaum en la Ciudad de México.
Ha trabajado con eficacia Rodríguez Velázquez, según consta, con Marcelo Ebrard, Miguel Ángel Mancera, pero sobre todo con Andrés Manuel López Obrador, mañaneras iniciales.
Así pues, el periodismo denigrante a lo loco, es una muestra que falta mucho por cambiar en este oficio que no es para los cínicos, como bien lo afirmó Ryzsard Kapuscinski.
López Obrador dijo que Rosa Icela es hija de una maestra de escuela de San Luis Potosí, y se formó como periodista, inicialmente, y luego como una luchadora social sin mácula.
Viene, entonces, del México Profundo que nos señaló debe ser esencial para las transformaciones, el antropólogo querido y recordado: Guillermo Bonfil Batalla.
El derechista caricaturista Calderón, la pone como si fuera una espía de López Obrador en los próximos años y tareas. Algo que muestra, claramente, la visión del conservadurismo sin ideas nuevas o chispeantes.
Hay que decir, Rosa Icela nació en Xilitla, aunque se desarrolló en Ciudad Valles.
La primera población citada tiene un lugar surrealista de primer orden llamado Las Pozas, que edificó el escocés Edward James, quien falleció en 1984.
El sitio es realmente de ensueño, ya que nos muestra porque esa corriente rupturista escogió México para muchas de sus andanzas. Asimismo la importancia que tuvo para el enorme Luis Buñuel este país y sus enseñanzas, donde la vida no es únicamente lo que enseñan malamente las escuelas como racionalidad.
Así pues, la confluencia del apoyo a los más necesitados y la idea de utilizar la imaginación para lograr lo imposible, debe estar grabado en aquella niña que sigue frecuentando SLP pero trabaja en toda la República.
De la supuesta crítica al chascarrillo irrelevante que termina en parodia está hecha, todavía, nuestra prensa.
@jamelendez44
