- La SRE señala que la Ley texana violenta el derecho soberano de México para decidir, acorde a sus propias políticas, quién cuenta con la autorización de entrar a nuestro país; así como también apunta el impacto de la Ley al diálogo bilateral sobre asuntos fronterizos y la afectación al comercial.
Ciudad de México, 21 de marzo (SinEmbargo).- La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) presentó un escrito ante una Corte de Estados Unidos para impugnar la Ley SB4, la cual permite el arresto de migrantes en el estado de Texas.
A través de sus redes sociales, la Cancillería mexicana informó que el escrito de amigo de la Corte (amicuos curiae) fue entregado este jueves ante la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito de Estados Unidos contra la iniciativa texana que, afirma, “viola los derechos humanos de las personas migrantes” al considerarla discriminatoria, racista y que perfila para ser enemiga de la dignidad y seguridad de los connacionales que se encuentran en dicho país.
El escrito añade, está integrada por cinco argumentos: el primero, que la Ley puede conducir a acoso, detención, expulsión y criminalización indebida de personas mexicanas por su “apariencia latina”; el segundo, apela que la Ley puede generar ambiente de incertidumbre, temor y vulnerabilidad.
“Contraviene la exclusividad de la federación de regular la materia migratoria”, versa el tercer punto.
Además, señala que violenta el derecho soberano de México para decidir, acorde a sus propias políticas, quién cuenta con la autorización de entrar a nuestro país; así como también apunta el impacto de la Ley al diálogo bilateral sobre asuntos fronterizos y la afectación al comercial.
“México no dejará nunca en desamparo a sus connacionales en ninguna parte del mundo. ¡Nuestras y nuestros migrantes no están solos!”, finalizó.
La mañana de hoy, la Canciller Alicia Bárcena Ibarra aseguró que México “está actuando con mucha fuerza” contra la Ley SB4, la cual otorga a la policía de Texas amplios poderes para arrestar a personas migrantes que sean sospechosas de haber entrado a Estados Unidos de forma irregular.
“México está actuando con mucha firmeza por instrucciones del señor Presidente. Primero, nosotros vamos a proteger en primer lugar a nuestros connacionales. Y tenemos 11 consulados en Texas que tienen instrucciones precisas para brindar protección, apoyo, orientación en caso de que se enfrenten a algún problema. Y para ello, nosotros hemos puesto a disposición un sistema de apoyo legal. Cualquier persona que empiece a tener ya algún problema, ahí estamos”, dijo.
En segundo lugar, Bárcena Ibarra señaló que “hay mucha confusión porque esta Ley no ha entrado aún en vigor”, ya que existe “una discusión en la Corte de Apelaciones, donde hay tres jueces: uno a favor, otro en contra y una que no se ha pronunciado”. “Y va a haber una audiencia el 3 de abril, donde se va a tomar la decisión final”, explicó desde Santa Lucía del Camino, Oaxaca.
“Ahí nosotros mandamos una cosa que se llama amicus curiae (amigos de la corte), donde estamos poniendo nuestra defensa, más bien los puntos de vista de México. ¿Cuántos mexicanos hay en Texas? El 26 por ciento de la población de Texas es de origen o mexicanos. Es muy fuerte, y también la contribución que hacemos a la economía de Texas”, destacó.
Durante la conferencia de prensa matutina del Presidente Andrés Manuel López Obrador, la Canciller mexicana consideró que en ese contexto se ha logrado algo “inédito” en el país: “un consenso político”. “Todas las fuerzas políticas, los legisladores, los partidos políticos, los candidatos, el Gabinete estamos actuando todos en conjunto contra esta Ley injusta, discriminatoria”, celebró.
Además, la funcionaria insistió en que la Ley de Texas “es profundamente inconstitucional porque el tema migratorio en Estados Unidos es federal, igual que nosotros”. “Entonces no vamos a permitir ninguna acción del estado de Texas, ni las autoridades, ni los policías, ni nadie que actúe en materia migratoria a nivel estatal o de los condados. Esto es una materia federal y para nosotros también, así que estamos ahí”, subrayó.
CORTE DE APELACIONES
SUSPENDE LA LEY DE TEXAS
El pasado 19 de marzo, un tribunal federal de apelaciones emitió una orden que impide nuevamente a Texas arrestar a migrantes sospechosos de haber ingresado irregularmente a Estados Unidos. El fallo se produjo unas horas después de que la Corte Suprema permitió la entrada en vigor de la nueva Ley migratoria.
La decisión del Corte Federal de Apelaciones del 5to Circuito llega unas semanas después de que un panel del mismo tribunal despejó el camino para que Texas aplicara la Ley al suspender la orden de un Juez de menor instancia.
Pero en una decisión de dos a uno, la corte de apelaciones retiró dicha suspensión antes de que la corte escuchara los argumentos el miércoles.
Las autoridades de Texas no habían anunciado ningún arresto en virtud de la nueva Ley.
El martes, gracias a un fallo dividido, la Corte Suprema de Estados Unidos permitió a Texas implementar una Ley que le otorga a la policía amplios poderes para arrestar a migrantes que sean sospechosos de haber entrado al país de forma irregular en lo que se resuelve la batalla jurídica en torno a la medida.
La mayoría conservadora del tribunal rechazó una solicitud de emergencia que presentó el Gobierno del Presidente Joe Biden, que sostiene que la Ley es una clara violación a la autoridad federal que provocará caos en las leyes migratorias.
El Gobernador de Texas, Greg Abbott, elogió la orden — y la Ley — que permite a cualquier agente policial de Texas detener a migrantes por entrada irregular y faculta a los jueces para que ordenen su salida de Estados Unidos.
El máximo tribunal estadounidense no abordó la constitucionalidad de la Ley. La medida regresó a la corte de apelaciones, que se pronunció más tarde.
Tampoco quedó claro a dónde podrían ir los migrantes que sean expulsados del país. La Ley establece que deben ser enviados a los puertos de entrada ubicados en la frontera entre Estados Unidos y México, incluso si no son ciudadanos mexicanos.
Pero el Gobierno de México dijo el martes que “bajo ninguna circunstancia” aceptará el retorno de ningún migrante a su territorio desde el estado de Texas. México no está obligado a aceptar la deportación de nadie excepto de ciudadanos mexicanos.
México también condenó que se permita la entrada en vigor de la Ley de Texas, asegurando que criminaliza a los migrantes y conduce a la separación de familias, la discriminación y el encasillamiento racial. El Gobierno indicó que presentará su postura ante la corte de apelaciones que recibirá el caso.
“México rechaza tajantemente cualquier medida que permita a las autoridades estatales o locales ejercer labores de control migratorio, detener y retornar a personas nacionales o extranjeras a territorio mexicano”, manifestó la Secretaría de Relaciones Exteriores en un comunicado.
Por su parte, el Departamento de Seguridad Nacional indicó que el Gobierno federal seguirá recurriendo en los tribunales una Ley que “complicará más” el trabajo de sus efectivos “ya desbordados”. La agencia no participará en la aplicación de la norma conocida como Proyecto de Ley 4 del Senado (SB4, por sus iniciales en inglés).
Los detractores afirman que la SB4 es el intento más drástico de un estado por controlar la migración desde que Arizona implementó hace más de 10 años una Ley de la cual la Corte Suprema anuló algunas partes. Los críticos también indicaron que la medida de Texas podría dar lugar a violaciones de los derechos civiles y a encasillamiento racial.
Texas, por su parte, ha argumentado que tiene derecho a tomar medidas ante lo que, según las autoridades, es una crisis actual en la frontera sur. El Departamento de Justicia Penal de Texas afirmó en un comunicado que está “preparado para gestionar cualquier afluencia de población” asociada a la Ley estatal.